Se creó el Instituto Mixto de Turismo de Miramar

El Concejo Deliberante de General Alvarado aprobó la propuesta que surgiera en 2018 y luego de ajustes y correcciones se terminó definiendo el proyecto final que contó con el aval de Instituciones y Cámaras locales vinculadas a la actividad turística.

Luego de ser tratado en Comisión Especial, el Concejo Deliberante trabajó hoy sobre la Ordenanza que logró imponerse con 13 votos afirmativos, 2 negativos y 1 abstención.

Los ediles definieron que este nuevo órgano de consulta estará integrado por representantes del Departamento Ejecutivo y por entidades del sector privado, legalmente constituidas, de los sectores gastronómicos, hoteleros, martilleros, mercantil, unidades turísticas fiscales y agencias de viajes.

El objetivo del IMT será incrementar el desarrollo de la actividad turística, orientando y ejecutando políticas de inversión y promoción. Asimismo, buscará actuar como canal que permita articular entre el ámbito público y el privado, de manera dinámica y participativa, según reza la ordenanza. Así como también, buscará desarrollar e implementar los programas y estrategias de promoción turística de las ciudades del Distrito.

El Instituto, podrá impulsar investigaciones referentes a la actividad y los mercados actuales y potenciales, entre otras actividades que permitan el crecimiento del sector.

En cuanto a su estructura y funcionamiento, se estableció que el lugar que ocupará será designado por el Departamento Ejecutivo local y no requerirá costos de estructura. El Directorio será ocupado por 8 miembros, cuatro por parte del municipio y cuatro representando al sector privado y el Intendente designará quien ejercerá como Presidente.

Uno de los puntos a los que habrá que prestarle atención es al origen de los recursos que se utilizarán para el funcionamiento del IMT. Según se explica en la norma, provendrán del Fondo de Inversión Turística que se integrará con recursos de aportes públicos o privados y por una Tasa o derecho a crearse. En este punto existen dos opciones por las que deberán definirse que son la creación de un nuevo gravamen para los vecinos o si se le cobrará a los turistas, tal cual lo implementan otras ciudades turísticas.