Vecinos de las playas del sur reclaman por incumplimientos de las UTF

La Asamblea Ciudadana Luna Roja viene querellando judicialmente las causas por contaminación, usurpación de espacio público y discriminación social al Balneario Manantiales Club de Mar, a cargo de Rivan SA empresa que posee la concesión de la UTF Arroyo Lobería.

Desde la organización vecinal, plantean una problemática que refiere a las explotaciones de unidades fiscales en la zona sur de Mar del Plata. Con respecto a la posición de Rivan SA manifiestan que desde el año 2012 no se cumplimentó el requerimiento en cuanto a la presentación de los Planos de Obra.

Por medio de un comunicado, explicaron que "Más allá del mero carácter deficitario por parte de la administración municipal sobre observaciones que pudiéramos hacer al incumplimiento sostenido durante nueve años que concluye con una multa irrisoria para los montos que maneja dicha SA, quisiéramos aprovechar esta oportunidad para preguntarnos a qué tipo de obras se refieren, y también, si dicho incumplimiento menciona o no las negligencias más significativas del caso Manantiales Club de Mar".

En este sentido, esta obra mencionada no es otra cosa que la bajada pública, los baños públicos y el área de uso recreativo que debería estar abierto al público los 365 días del año y que el concesionario asumió realizar en el contrato de concesión de la Unidad Turística Fiscal Arroyo Lobería en el año 2012 y que pasados nueve años recibieron la multa por la infracción.

"Ahora nos preguntamos y les preguntamos a la comunidad y los funcionarios que ocupan los cargos del estado municipal. ¿Qué pasó con el volcado de efluentes cloacales que la comunidad de Playa Chapadmalal viene denunciando desde el año 2009? ¿Qué pasó con la falta de permisos para el uso del recurso agua que el concesionario debió tramitar ante la Autoridad del Agua y que el EMTUR nunca exigió su cumplimentación? ¿Cómo piensa la administración pública resolver una obra que debió haber contado con instancias de Participación de la Ciudadana garantizadas por la Ley General de Ambiente y que el municipio nunca implementó?" se preguntan desde la Asamblea Luna Roja.



Por otra parte, llaman la atención sobre el incumplimiento del Código de Aguas de la Provincia de Buenos Aires que desde el año 1998 prohíbe la construcción edilicia a menos de 150 metros de la línea marítima. De tal forma, plantean "todas aquellas obras edilicias que a partir de 1998, la Dirección de Obras del Municipio aprobó sobre las playas fueron aprobadas en infracción a una ley provincial que tanto el concesionario como el propio estado municipal desconocieron".

"Que exista una ley provincial vigente, que protege el ambiente costero y a la cual se debe adecuar la legislación y resoluciones municipales y sea la misma municipalidad quien la desconozca, atenta contra el estado de derecho y el principio de legalidad en desmedro de los derechos de incidencia colectiva y de las generaciones futuras, aquellas que, de continuar este modus operandi, encontrarán las playas tapadas por paredes techos y cemento" exponen, al tiempo que refieren a la Unidad Turística Fiscal Playa Bonita, Balneario y la Unidad Turística Fiscal Arroyo Seco, Balneario Cruz de Sur que infringen el Código de Aguas de la Provincia de Buenos Aires.