Presupuesto participativo 2023 en Vela y Gardey

Este jueves se dio inicio al proceso de presupuesto participativo 2023 en las localidades de María Ignacia – Vela y Gardey, pertenecientes al Municipio de Tandil. Esta iniciativa, ya establecida desde hace varios años en la región, permite que los propios vecinos sean los protagonistas en la definición del destino de los fondos públicos asignados, teniendo la oportunidad de elaborar y decidir la ejecución de proyectos que impactarán en sus comunidades.

Las primeras asambleas tuvieron lugar en el Prado Español de María Ignacia – Vela y en el Centro Cultural “La Vieja Escuela” de Gardey, durante la tarde del jueves. En estos encuentros, los vecinos acordaron las pautas de funcionamiento y presentaron sus primeras ideas y necesidades, que serán convertidas en proyectos formales para ser votados en la última asamblea.

El proceso continuará con una segunda asamblea en María Ignacia – Vela el jueves 27 de julio a las 19.00, mientras que Gardey tendrá su próximo encuentro el martes 1º de agosto, también a las 19.00.

El presupuesto participativo es una herramienta coordinada por la Secretaría de Gobierno del Municipio, en colaboración con las Delegaciones Municipales, que ha demostrado ser efectiva en la concreción de importantes obras y en el financiamiento de diversos proyectos de instituciones locales.

Para la edición de este año, las autoridades comunales han asignado un presupuesto de $11.000.000 para María Ignacia – Vela y de $9.000.000 para Gardey, con el objetivo de abordar las necesidades y demandas más apremiantes de cada localidad.

El proceso de presupuesto participativo se basa en un sistema asambleario en el que se establecen los requisitos de participación y los proyectos que serán considerados para cada edición. Una vez definidos, los proyectos son elaborados conjuntamente con las diferentes áreas comunales, asegurando una planificación efectiva y una ejecución transparente.

El desenlace del proceso se alcanza con una última asamblea, donde los vecinos tienen la oportunidad de votar y establecer el orden de prioridad para la ejecución de cada propuesta, hasta que se cubra la totalidad del presupuesto asignado.

El compromiso de los ciudadanos con el presupuesto participativo se ha fortalecido a lo largo de los años, y se ha convertido en un espacio clave para la construcción de una comunidad más inclusiva y empoderada. La posibilidad de decidir directamente sobre el destino de los recursos públicos ha generado un sentido de corresponsabilidad y una mayor conexión entre la comunidad y sus autoridades municipales.