Día de la Ganadería

Cada 10 de julio se celebra el Día de la Ganadería en honor a la fundación de la Sociedad Rural Argentina (SRA) en 1866, una entidad que ha sido clave en el impulso y desarrollo de esta importante actividad. En los últimos años, hemos presenciado un cambio significativo en el paradigma de la producción animal, con un enfoque centrado en las buenas prácticas agropecuarias y el bienestar animal (BA) como pilares fundamentales.

En este contexto, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) ha asumido un rol fundamental como ejecutor de las políticas nacionales en materia de sanidad y calidad animal, promoviendo el bienestar animal como un valor esencial que debe ser abordado de manera integral a lo largo de toda la cadena pecuaria. Esto no solo busca minimizar los problemas y salvaguardar las inversiones, sino también fomentar el desarrollo sostenible de cada actividad, respondiendo a la demanda creciente tanto del público en general como de los consumidores de productos de origen animal.

Desde hace más de dos décadas, el Senasa ha desarrollado diversas normas, manuales y materiales de comunicación, así como actividades de capacitación específicas, con el objetivo de concientizar a todos los actores involucrados en la producción animal. Estas iniciativas han permitido avanzar en línea con los principios de bienestar animal reconocidos internacionalmente, siendo la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA) una de las instituciones que define el bienestar animal como el estado físico y mental de un animal en relación con las condiciones en las que vive y muere. Esto implica que el bienestar animal debe ser considerado en todos los procesos de producción, tanto en sistemas extensivos como intensivos.

Independientemente de la etapa de producción en la que participen los actores de la cadena, el bienestar animal debe ser considerado como un factor clave al tomar decisiones. Esto no solo contribuirá a mejorar la calidad de vida de los animales, sino que también generará beneficios tanto para las personas como para el medioambiente.

El bienestar animal y las buenas prácticas agropecuarias no solo son responsabilidad de los productores y ganaderos, sino de todos los actores de la sociedad. Los consumidores juegan un papel crucial al elegir productos que provengan de sistemas que respeten el bienestar animal. Asimismo, las instituciones gubernamentales y organizaciones no gubernamentales deben seguir promoviendo y respaldando iniciativas que fomenten el bienestar animal en la ganadería.