CICOP denuncia el vaciamiento de la salud en General Pueyrredón
La Asociación Sindical CICOP alerta sobre la crisis en la salud pública de Mar del Plata, con salarios bajos, desinversión y condiciones laborales precarias, afectando gravemente el sistema sanitario local.
La salud pública en General Pueyrredón atraviesa una situación crítica, según la Asociación Sindical de Profesionales de la Salud de la Provincia de Buenos Aires (CICOP). Los trabajadores de la salud han denunciado un vaciamiento sistemático del sistema sanitario local, impulsado por la desinversión, la precarización laboral y los salarios bajos, lo que ha llevado a una situación que describen como una "tormenta perfecta".
La secretaria General Adjunta de CICOP, Micaela D´Ambra, fue tajante al señalar que los salarios actuales de los profesionales de la salud en el partido "se asemejan a los del 2001". Según D´Ambra, desde diciembre hasta la fecha, el poder adquisitivo de los trabajadores municipales ha caído más del 60%, lo que ha generado una situación insostenible.
Bajos salarios y desinversión en salud
Los profesionales de la salud en General Pueyrredón enfrentan una grave precarización salarial. Un médico especializado, por ejemplo, cobra alrededor de $500.000, pero debe afrontar gastos obligatorios como $190.000 en Caja Profesional, matrícula y seguro. Esta situación se ve agravada por un aumento salarial insuficiente del 20% en 2024, mientras que la inflación acumulada supera el 80%.
A esta realidad se suma el hecho de que el distrito tiene uno de los gastos en salud per cápita más bajos de la provincia, con apenas $28.682 por habitante, posicionándose detrás de otros municipios como La Matanza, Lomas de Zamora y La Plata. La situación se ha visto empeorada por los recortes presupuestarios a nivel nacional desde diciembre de 2023, que han impactado negativamente en áreas críticas como imágenes, laboratorio y especialidades médicas.
Las condiciones laborales de los trabajadores de la salud en General Pueyrredón han retrocedido significativamente. D´Ambra destacó la falta de insumos y la discontinuidad en la provisión de medicamentos, así como la carencia de equipamientos y el mantenimiento edilicio deficiente en los centros de salud. Además, la escasez de personal de seguridad ha expuesto a los trabajadores a situaciones de riesgo.
La reducción al máximo de las horas extras también ha afectado los horarios de atención y la capacidad de los centros de salud para atender la demanda creciente. En las cinco guardias que debe garantizar el municipio, los médicos están presentes de forma intermitente, lo que ha impedido la apertura de nuevos centros de guardia debido a la falta de inversión en personal.
Persecución y hostigamiento a los trabajadores
La situación se agrava aún más con la política de hostigamiento que, según denuncian desde CICOP, lleva adelante el intendente Guillermo Montenegro. Los trabajadores enfrentan descuentos ilegales por medidas de lucha y traslados arbitrarios de profesionales, en un intento por disciplinar al personal.
El impacto de estas políticas es evidente: la demanda en los centros de salud ha crecido un 25% debido a la liberación de los precios de las prepagas, el desfinanciamiento de las obras sociales y el aumento de la desocupación.